viernes, 20 de marzo de 2009

Pijez

Venga va, le voy a dar la razón a mi novio, pero espero que no se me confíe porque no va a pasar muchas más veces.
Yo soy muy quejica, pero mucho mucho. Y me quejo de los gilip….. de DUWO, que es la empresa/fundación “sin ánimo de lucro” que alquila las casas a los Eramus y otras personas por La Haya, Delft y demás lugares de Holanda. Para empezar a quejarme de semejantes gañanes, he de comentar que vivo lejos del centro y de la universidad, en una casa que aunque me coma la mierda, ya no me quejo porque me he acostumbrado a que mis compañeros de piso no frieguen y no recojan las cosas que cocinan y no sepan que si usas un tupper, otra persona puede usar la cacerola para hacerse su comida.
Puedo vivir con eso. Y también puedo vivir con mi moqueta de hace mil doscientos años y puedo apañarme con mi habitación “amueblada” antes de la existencia de Ik… Confieso que cuando llegué a mi casa se me cayó el alma a los pies.
Pero no voy a poder vivir con lo que me ha pasado hoy.
Resulta que debo de ser la única Erasmus que no engorda, y esto está bien. Pero también debo de ser la única Erasmus que se hace pija, lo confieso, y eso está maaaaaaaaal. Pues sí, ¿qué pasa? Si no te gusta, no mires (acabo de cruzarme con una choni del programa Athens que ha dicho: “¡Ay! ¡Qué chaqueta más fea!”. Mi chaqueta de Cu…... Ha muerto de una mirada, por pensar que en Delft ella es la única española). Porque he dejado de maquillarme, de llevar tacones, de arreglarme, de llevar bolsos sobaqueras, porque en Holanda vas en bici y las cosas son prácticas y cómodas. Y por eso ahora la pijez me da por otros lados: las expresiones (qué guaaaaaaay, es una pena que mis amigas de Delft no me lean). Y claro, he tenido que dejar mi ropa pija y comprarme mucha ropa más arrastrada.
El otro día llegué de compras, ordené mi armario, y esta mañana cuando me he levantado, lo he abierto, y como había sacado un montón de cosas, he dicho: “¡Jolines! ¡No tengo ropa!”. Y un amigo que ha venido a verme y estaba durmiendo en el suelo, me ha tirado la almohada por petarda, en plan: “¡¡Repija!!”.
Y el karma, por haberme ido de compras, me la ha vuelto a devolver. Y me ha roto el armario, por sobrepeso. Se ha roto la barra…
Armarios de la época pre-Ik…... DUWO: ¡Cómo os odio ahora! Además de que a mí no me dieron nada nuevo, ni mantas, ni almohada, ni nada, y a todos mis amigos les dio todo nuevo. Me tuve que comprar hasta el nórdico porque parecía que habían meado en el viejo. Y ahora… Me tengo que comprar un armario nuevo. Por quejarme de que no tengo ropa. Pero ésta DUWO me la paga, como que me llamo Laura.
Por cierto, mi amigo se sigue riendo.

2 comentarios:

--pab7oAB-- dijo...

si, todavia m estoy riendo, jajaj

LauradeexpatenChina dijo...

eres malo y dios te va a castigar...