lunes, 3 de agosto de 2009

Dutch Gay Pride

Awesome!Yo quiero volver al día de la Reina. Esto creo que lo sabe todo el mundo que me lea y que me escuche, y también sabe todo el mundo que no voy a tener dinero para venir y que mi jefe no me va a dejar aunque sí que tenga dinero. Pero resulta que el otro día estuve en el día de las Reinas (de las drag queens, más bien), no se queda corta la fiesta al lado de la de la reina de verdad que no paga impuestos y cuya nuera es hija de un ministro de Videla.
Estoy yo pensando que es complicado ser republicano con la fiesta que se marca Bea y los regalos de los Reyes Magos, por muy políticamente incorrecto que sea esto después de mencionar a Videla…
A ver, que me disperso como en la vida real. Resulta que tengo, como no, esto ya es habitual, una visita: mi amiga Sandra. En la ruta que tengo hecha y cuyos mapas los tengo grabados a fuego, hago Amsterdam el sábado, porque así podemos salir por la noche también. Pues nos acercábamos Sandrita y yo a Amsterdam este sábado, y veo un avión de éstos de playa con anuncios: See it live; http://www.canalparade.nl/.
El tren llega a Amsterdam y veo los canales a rebosar de gente. Y pienso: “ay, Dios, dónde me he metido…”. En el Gay Pride. Ni más ni menos. Y claro, preguntad a Sandra que qué le parece Amsterdam, porque no vio nada más que fiesta. Y qué fiesta, porque había atasco en los canales de la cantidad de barcos que había en el agua.

Era alucinante. El Amstel estaba a rebosar y no cabía un alma por la calle. Y todo era una marea rosa igual que en abril era una marea naranja.
Yo hasta que no voy al Orgullo Gay de Madrid no empiezo las vacaciones, y bueno, como este año no tengo pues tampoco me molesta tanto no haber ido, pero sentía que me faltaba algo: aquí lo he tenido. Y resulta que mira que me gusta Madrid y mira que me gusta el Orgullo Gay y me lo paso genial, pero no puedes ir a la cabalgata porque hace un calor que no te puedes ni mover. Y esto es un minipunto para Holanda. A ver, que fui a Amsterdam porque estaba mi amiga, que yo no tenía ni idea de lo que se cocía, pero desde luego, que si lo hubiera sabido habría ido corriendo de cualquier manera. Pero en la cabalgata, Canal Parade que se llamaba, se podía estar porque no caía un sol a plomo ni hacía 35 grados a la sombra. Eso sí, yo no veía casi nada porque en España soy alta y saco la cabeza por encima de casi todas las mujeres y de gran parte de los hombres, y aquí me quedo enanita. Pero nos fuimos Sandrita y yo cerveza(s) en mano a ver a la gente bailando, o moviéndose y punto, porque siguen siendo holandeses con las caderas soldadas a los hombros.
En Amsterdam hay una libertad un poco de doble moral, las cosas como son, que se puede fumar marihuana pero no se puede ir borracho por la calle. Y yo he visto muchas mujeres en escaparates y nunca he visto a un hombre vendiéndose. Y sin embargo la homosexualidad está tan aceptada, es tan normal ver a dos mujeres por la calle de la mano y que nadie diga nada, que se supone que el Gay Pride sí debería ser aquí la fiesta de la ciudad. Y casi lo consigue. Hay que ver, toda una ciudad volcada en dos fiestas en lugar de doscientas como en España, y consiguen que una vez que las pruebas, quieras venir todos los anos hasta que tu hígado aguante.
Y lo mejor de todo: ¡sin tabaco!

2 comentarios:

Rous dijo...

que rabia me dio no poder ir al dia de la reina, fue mucha gente de aki y se lo pasaron genial!
el ano que viene, si puedes volver, cuenta conmigo para vestirme de naranja y rosa :D

sandra dijo...

pues del día de la reina no puedo opinar aunq me gustaría, pero también he de reconocer q el canalparade fue increible! junta clima, con el rollito canales, y q todo el mundo podía beber de facto ese día en la calle. te espero para la siguiente de estrellas rosas lau!